En el año 1780 Francisco Cabarrús y Necker, al frente de un grupo de capitalistas españoles, franceses y holandeses, facilitan al Tesoro español nueve millones de pesos, mediante la puesta en circulación de una nueva modalidad de Deuda Pública fraccionada en títulos, con un valor nominal individual de 600 pesos, al 4 % de interés, renovables anualmente. La segunda emisión tendría lugar en el año 1781. Ramón Santillán calificó a los vales reales como el primer papel moneda que circuló en España, pues debían ser aceptados como medio de pago, salvo ene. Pago de los salarios y comercio al por menor.