Esta compañía tiene su origen en el Ferrocarril de Zaragoza a Escatrón, una línea que fue concebida para cubrir los 85 km. existentes entre Zaragoza y la cuenca carbonífera de Escatrón, de los que solamente se construyeron y explotaron 69,62 km –entre Zaragoza y La Puebla de Híjar. Una vez constituida, se le añadió la concesión de la línea hasta Gargallo, para dar salida también al carbón de las explotaciones existentes en Gargallo y Urtrillas. Formaron parte de su Consejo de Administración el Conde de Peralcampo y P. de la Escosura.Entró en suspensión de pagos el 26 de octubre de 1880 y el 13 de julio de 1991 los activos de la empresa eran adquiridos por la compañía ferrocarril de Valls a Vilanova y Barcelona; en esta venta intervino como hombre de paja José María Anglada Ruiz. La operación dio lugar a una impugnación por parte de los accionistas minoritarios de la Compañía de los Ferrocarriles Carboníferos de Aragón, ya que la venta de los activos se llevó a cabo pocos días antes de la aprobación del convenio con los acreedores.